Capitalismo: de marxista a ícono pop
martes, 9 de octubre de 2007
Por Alonso Izaguirre
4Su imagen -reproducida en los más diversos artículos- es un ícono revolucionario.
4Hoy se recuerdan los 40 años de su muerte, ocurrida en Bolivia a manos del Ejército.
A 40 años de su muerte, la polémica figura del revolucionario argentino-cubano Ernesto 'Che' Guevara se consolida como un ícono de la resistencia y de la rebeldía entre los más jóvenes, pero también como una de las marcas no registradas más exitosas de los últimos tiempos.
Actualmente es posible encontrar el rostro del 'Che' -tomado de la foto de Korda, con la boina, la estrella de cinco puntas, el pelo largo y la mirada puesta en algún punto del vacío- en gorras, polos, bikinis, relojes, pines, toallas, afiches, banderolas de conciertos de rock o barras de algún equipo de fútbol. Incluso personajes populares, como el ex futbolista Diego Armando Maradona o el boxeador Myke Tyson, se tatuaron el rostro del comandante sobre la piel.
Si volviera a la vida, Guevara, defensor a ultranza del marxismo y enemigo del capitalismo, regresaría a la tumba asqueado de su propia figura, convertida hoy en una de las imágenes más exitosas de la cultura pop.
SIMPLE FIGURA. "El propio sistema mediático neutralizó la condición subversiva que caracterizó al 'Che' Guevara originalmente y lo convirtió en un fenómeno de moda, en un afiche, llavero o calcomanía. Para los jóvenes de hoy, el 'Che' no pasa de ser una figura sobre un tablero", sostiene el psicólogo Julio Hevia.
En palabras del especialista, el revolucionario argentino dejó de ser una auténtica piedra en el zapato del sistema burgués, un enemigo del establishment en los años 60, para constituirse, tras su muerte, "en un adorno de la vitrina posmoderna".
Esa masificación y comercialización del 'Che' también alcanzó a la Cuba comunista de Fidel Castro, donde la imagen del 'Guerrillero Heroico' se ofrece bajo la forma de cualquier producto, convirtiéndose en uno de los bienes más preciados de los turistas que llegan a la isla. "La imagen del 'Che' fue restituida como una figura legendaria, pero ajena al contexto político, económico y social en la que surgió originalmente", opina Hevia.
CONTROVERTIDO. La idealización y el mercado han convertido al 'Che' en un ser perfecto, ocultando rasgos discutibles de su personalidad y de su accionar. Para el comandante de la Revolución Cubana, la violencia era la única forma de revertir las desigualdades sociales en Latinoamérica; por ello, no tuvo reparos en mandar al paredón a centenares de presos políticos cuando se encargó de la jefatura del cuartel militar La Cabaña, en 1959. "Los fusilamientos son no tan solo una necesidad del pueblo de Cuba, sino también una imposición de este pueblo", escribió.
Dariel Alarcón, 'Benigno', uno de los tres combatientes cubanos sobrevivientes de la guerrilla en Bolivia, recordó la manera en que Guevara no aceptaba que se le discutiera nada, tajantemente y de mala forma, empeorando el clima de tensión en la guerrilla boliviana.
En el otro extremo de su personalidad, el 'Che' fue un sujeto muy franco y exigente consigo mismo. Se ganó la fama de esforzado y valeroso en el campo de batalla, y no permitió ningún tipo de lujos, ni para él ni para su familia, durante sus años de comandante y ministro de Industria en Cuba. Los colaboradores más cercanos de Guevara desarrollaron con él una conexión casi mística, de una fidelidad inquebrantable.
El 'Che' ostentaba, además, una independencia de criterio que lo hizo denunciar, en febrero de 1965, el imperialismo soviético, en una actitud vista por muchos biógrafos como un rompimiento con la Revolución Cubana. Pocos meses después de su arribo a La Habana, entró en la clandestinidad y partió hacia el continente africano para luchar en el Congo Belga al mando de un contingente de internacionalistas cubanos, pero la misión se transformó en derrota y el 'Che' abandonó el país.
EL FIN. En noviembre del 66 entró en Bolivia para instaurar una revolución continental en América Latina, con el fin de contrarrestar la hegemonía estadounidense. Menos de un año después, su tropa de 46 guerrilleros, integrada por bolivianos, argentinos y peruanos, fue liquidada por un Ejército boliviano que estaba asesorado por norteamericanos.
El 'Che' fue capturado por los soldados bolivianos luego de un duro combate en la quebrada del Churo. Estaba hambriento, con sed, sucio, sin botas, herido de bala en una pierna y sufría de una fuerte crisis asmática. Al día siguiente, el 9 de octubre de 1967, fue ejecutado en una escuelita del poblado de La Higuera. Su cadáver fue expuesto públicamente y, luego, enterrado en secreto.
Sus verdugos, en una jugada torpe, quisieron acabar con un problema sin imaginar que atizaban el fuego de un mito. Treinta años después, en 1997, los huesos fueron hallados en una fosa común en el poblado de Vallegrande. Hoy, descansan en un mausoleo en la cubana Santa Clara.
En el libro 100 horas con Fidel, del español Ignacio Ramonet, Castro negó que hubiera tenido desacuerdos importantes con el 'Che'. "Ahora está en cada lugar, en todo sitio donde hay una causa justa que defender", refirió el máximo líder cubano, citado por la agencia AP.
En opinión del psicólogo Hevia, "el 'Che' quizá fue una de las mejores ilustraciones en vida de aquella frase que usó la gente de Mayo del 68: el único modo de ser realista es exigir lo imposible, y el 'Che' así lo hizo; su muerte no fue un fracaso, desde el momento en que su vida misma no lo fue".
No obstante, su banalización continúa. A pesar de que hace algunos años se intentó usar su rostro para una conocida marca de vodka, es de esperar que -según el crítico de arte Jorge Villacorta- alguien venda comida con su imagen o que se cree una línea de ropa con su nombre.
4Su imagen -reproducida en los más diversos artículos- es un ícono revolucionario.
4Hoy se recuerdan los 40 años de su muerte, ocurrida en Bolivia a manos del Ejército.
A 40 años de su muerte, la polémica figura del revolucionario argentino-cubano Ernesto 'Che' Guevara se consolida como un ícono de la resistencia y de la rebeldía entre los más jóvenes, pero también como una de las marcas no registradas más exitosas de los últimos tiempos.
Actualmente es posible encontrar el rostro del 'Che' -tomado de la foto de Korda, con la boina, la estrella de cinco puntas, el pelo largo y la mirada puesta en algún punto del vacío- en gorras, polos, bikinis, relojes, pines, toallas, afiches, banderolas de conciertos de rock o barras de algún equipo de fútbol. Incluso personajes populares, como el ex futbolista Diego Armando Maradona o el boxeador Myke Tyson, se tatuaron el rostro del comandante sobre la piel.
Si volviera a la vida, Guevara, defensor a ultranza del marxismo y enemigo del capitalismo, regresaría a la tumba asqueado de su propia figura, convertida hoy en una de las imágenes más exitosas de la cultura pop.
SIMPLE FIGURA. "El propio sistema mediático neutralizó la condición subversiva que caracterizó al 'Che' Guevara originalmente y lo convirtió en un fenómeno de moda, en un afiche, llavero o calcomanía. Para los jóvenes de hoy, el 'Che' no pasa de ser una figura sobre un tablero", sostiene el psicólogo Julio Hevia.
En palabras del especialista, el revolucionario argentino dejó de ser una auténtica piedra en el zapato del sistema burgués, un enemigo del establishment en los años 60, para constituirse, tras su muerte, "en un adorno de la vitrina posmoderna".
Esa masificación y comercialización del 'Che' también alcanzó a la Cuba comunista de Fidel Castro, donde la imagen del 'Guerrillero Heroico' se ofrece bajo la forma de cualquier producto, convirtiéndose en uno de los bienes más preciados de los turistas que llegan a la isla. "La imagen del 'Che' fue restituida como una figura legendaria, pero ajena al contexto político, económico y social en la que surgió originalmente", opina Hevia.
CONTROVERTIDO. La idealización y el mercado han convertido al 'Che' en un ser perfecto, ocultando rasgos discutibles de su personalidad y de su accionar. Para el comandante de la Revolución Cubana, la violencia era la única forma de revertir las desigualdades sociales en Latinoamérica; por ello, no tuvo reparos en mandar al paredón a centenares de presos políticos cuando se encargó de la jefatura del cuartel militar La Cabaña, en 1959. "Los fusilamientos son no tan solo una necesidad del pueblo de Cuba, sino también una imposición de este pueblo", escribió.
Dariel Alarcón, 'Benigno', uno de los tres combatientes cubanos sobrevivientes de la guerrilla en Bolivia, recordó la manera en que Guevara no aceptaba que se le discutiera nada, tajantemente y de mala forma, empeorando el clima de tensión en la guerrilla boliviana.
En el otro extremo de su personalidad, el 'Che' fue un sujeto muy franco y exigente consigo mismo. Se ganó la fama de esforzado y valeroso en el campo de batalla, y no permitió ningún tipo de lujos, ni para él ni para su familia, durante sus años de comandante y ministro de Industria en Cuba. Los colaboradores más cercanos de Guevara desarrollaron con él una conexión casi mística, de una fidelidad inquebrantable.
El 'Che' ostentaba, además, una independencia de criterio que lo hizo denunciar, en febrero de 1965, el imperialismo soviético, en una actitud vista por muchos biógrafos como un rompimiento con la Revolución Cubana. Pocos meses después de su arribo a La Habana, entró en la clandestinidad y partió hacia el continente africano para luchar en el Congo Belga al mando de un contingente de internacionalistas cubanos, pero la misión se transformó en derrota y el 'Che' abandonó el país.
EL FIN. En noviembre del 66 entró en Bolivia para instaurar una revolución continental en América Latina, con el fin de contrarrestar la hegemonía estadounidense. Menos de un año después, su tropa de 46 guerrilleros, integrada por bolivianos, argentinos y peruanos, fue liquidada por un Ejército boliviano que estaba asesorado por norteamericanos.
El 'Che' fue capturado por los soldados bolivianos luego de un duro combate en la quebrada del Churo. Estaba hambriento, con sed, sucio, sin botas, herido de bala en una pierna y sufría de una fuerte crisis asmática. Al día siguiente, el 9 de octubre de 1967, fue ejecutado en una escuelita del poblado de La Higuera. Su cadáver fue expuesto públicamente y, luego, enterrado en secreto.
Sus verdugos, en una jugada torpe, quisieron acabar con un problema sin imaginar que atizaban el fuego de un mito. Treinta años después, en 1997, los huesos fueron hallados en una fosa común en el poblado de Vallegrande. Hoy, descansan en un mausoleo en la cubana Santa Clara.
En el libro 100 horas con Fidel, del español Ignacio Ramonet, Castro negó que hubiera tenido desacuerdos importantes con el 'Che'. "Ahora está en cada lugar, en todo sitio donde hay una causa justa que defender", refirió el máximo líder cubano, citado por la agencia AP.
En opinión del psicólogo Hevia, "el 'Che' quizá fue una de las mejores ilustraciones en vida de aquella frase que usó la gente de Mayo del 68: el único modo de ser realista es exigir lo imposible, y el 'Che' así lo hizo; su muerte no fue un fracaso, desde el momento en que su vida misma no lo fue".
No obstante, su banalización continúa. A pesar de que hace algunos años se intentó usar su rostro para una conocida marca de vodka, es de esperar que -según el crítico de arte Jorge Villacorta- alguien venda comida con su imagen o que se cree una línea de ropa con su nombre.
1 Comments:
Considero que la "banalización" de estos personales representativos de determinados movimientos políticos no es una cuestión originada desde el capitalismo y la órbita "pop", nada más pensemos en "el culto a la personalidad" detrás de cada caudillo marxista a través de distintas épocas. Si no alzan a uno, construyen una estatua para otro, y un templo para el siguiente.
commented by Dr. Macacus, 11 de octubre de 2007, 0:09