Nacional: Protestas y huelga preceden a reunión trimestral de accionistas de Barrick Gold
lunes, 5 de noviembre de 2007
Más de mil personas salieron este fin de semana a las calles de Santiago de Chile con trajes típicos, música y danzas, para protestar contra el proyecto minero de oro de Pascua Lama - un proyecto multimillonario del que Barrick se ha estado vanagloriando desde los 90 - que amenaza el fértil Valle del Huasco. Mientras tanto, en el continente africano, casi el mismo número de trabajadores en huelga de la mina Bulyanhulu, también de la Barrick, en Tanzania, rechazó trabajar después del rompimiento de las negociaciones sobre salarios, condiciones de trabajo, salud y otras cuestiones en disputa. En cuatro días, Barrick despidió a todos los trabajadores en huelga.
Mientras Barrick proyecta una imagen libre de controversia política, esos últimos estallidos de resistencia organizada muestran luchas en marcha, descontento y enojo frente al gigante minero.
Cuando oponerse a Pascua Lama era la tendencia política
Para la gente fuera de Chile puede ser fácil olvidar que los sentimientos opuestos a la minería de oro y a favor de la protección del medio ambiente dominaban las plataformas electorales tanto de la Presidenta Bachelet como de su otrora oponente Sebastian Piñera. Ambos aseguraban a sus electores que los glaciares - situados justo al medio de una reserva de la biósfera de UNESCO - no serían tocados.
Luego, en un cambio que los opositores a la mina creen que fue planeado desde el inicio, Barrick abandonó su primera propuesta de reubicar los glaciares y el proyecto fue aprobado con condicionamientos destinados a mantener la integridad ambiental del frágil ecosistema de la región.
Los opositores a la mina, incluyendo al grupo indígena Diaguita Huascoaltino y al consejal Luis Faura Cortés, se mantienen inamovibles en su cuestionamiento, frente a lo que ven como garantías de papel y politiquería. Aún más, ya es de conocimiento público que las actividades de exploración de Barrick están conectadas con la disminución de un 56 a un 70 por ciento en los glaciares cercanos a la mina, contradiciendo las garantías de los informes de evaluación ambiental.
Las protestas del último fin de semana fueron sólo las últimas de una serie de manifestaciones contra el proyecto minero y dejan ver que la resistencia sige viva y que la gente de base en Chile no se ha dejado engañar por las maniobras políticas de Barrick
Atacar a la oposición sólo hará que arda con más fuerza
Han transcurrido casi diez años desde que em Tanzania un gran número de pequeños mineros (entre 30.000 y 400.000, según distintas estimaciones) fueron desalojados por la fuerza del sitio ocupado por el yacimiento de Bulyanhulu, para abrir espacio a las grandes empresas mineras. Pero la decisión de esta semana de despedir al millar de mineros en huelga sin duda reavivará este resentimiento histórico. En su momento, el acuerdo para quitarles la concesión a estos pequeños mineros fue gestionado por James Sinclair, presidente de Sutton Resources. Tanto él como su hija habían desarrollado lazos de amistad con el presidente de Tanzania y varios de sus ministros.
Las acusaciones de nepotismo de alto nivel han plagado desde entonces las operaciones de Bulyanhulu, con denuncias sobre millones en evasiones de impuestos que salieron a la luz el año pasado. Aún más, justamente el pasado mes de julio el gobierno tanzano fue criticado por firmar prematuramente un acuerdo minero con Barrick y venderle por demasiado poco dinero su 15 por ciento de participación en la mina de Bulyanhulu.
Bajo el barniz político, parece que Barrick va a tener que apaciguar los crecientes movimientos de descontento. Para mayor información sobre la resistencia a Barrick Gold en Nevada,EE.UU; Chile, Argentina, Tanzania, Australia y Perú, visitar el sitio web:
http://protestbarrick.net
Otra foto tomada en la marcha de agosto de 2007 contra Barrick en el Valle del Huasco. El Valle del Huasco, cuya principal actividad es la agricultura, es amenazado por el proyecto Pascua Lama de Barrick Gold. La minería de oro produce un promedio de 79 toneladas de desechos por cada onza de oro. Los desechos no solamente contienen cianuro, que es un químico tóxico usado en el proceso de exracción, sino que también contienen sulfuros y metales pesados, que contaminan el aire y el agua. Gran parte de Chile (especialmente el Norte) ya sufre los efectos de la grave contaminación causada por la minería.
Mientras Barrick proyecta una imagen libre de controversia política, esos últimos estallidos de resistencia organizada muestran luchas en marcha, descontento y enojo frente al gigante minero.
Cuando oponerse a Pascua Lama era la tendencia política
Para la gente fuera de Chile puede ser fácil olvidar que los sentimientos opuestos a la minería de oro y a favor de la protección del medio ambiente dominaban las plataformas electorales tanto de la Presidenta Bachelet como de su otrora oponente Sebastian Piñera. Ambos aseguraban a sus electores que los glaciares - situados justo al medio de una reserva de la biósfera de UNESCO - no serían tocados.
Luego, en un cambio que los opositores a la mina creen que fue planeado desde el inicio, Barrick abandonó su primera propuesta de reubicar los glaciares y el proyecto fue aprobado con condicionamientos destinados a mantener la integridad ambiental del frágil ecosistema de la región.
Los opositores a la mina, incluyendo al grupo indígena Diaguita Huascoaltino y al consejal Luis Faura Cortés, se mantienen inamovibles en su cuestionamiento, frente a lo que ven como garantías de papel y politiquería. Aún más, ya es de conocimiento público que las actividades de exploración de Barrick están conectadas con la disminución de un 56 a un 70 por ciento en los glaciares cercanos a la mina, contradiciendo las garantías de los informes de evaluación ambiental.
Las protestas del último fin de semana fueron sólo las últimas de una serie de manifestaciones contra el proyecto minero y dejan ver que la resistencia sige viva y que la gente de base en Chile no se ha dejado engañar por las maniobras políticas de Barrick
Atacar a la oposición sólo hará que arda con más fuerza
Han transcurrido casi diez años desde que em Tanzania un gran número de pequeños mineros (entre 30.000 y 400.000, según distintas estimaciones) fueron desalojados por la fuerza del sitio ocupado por el yacimiento de Bulyanhulu, para abrir espacio a las grandes empresas mineras. Pero la decisión de esta semana de despedir al millar de mineros en huelga sin duda reavivará este resentimiento histórico. En su momento, el acuerdo para quitarles la concesión a estos pequeños mineros fue gestionado por James Sinclair, presidente de Sutton Resources. Tanto él como su hija habían desarrollado lazos de amistad con el presidente de Tanzania y varios de sus ministros.
Las acusaciones de nepotismo de alto nivel han plagado desde entonces las operaciones de Bulyanhulu, con denuncias sobre millones en evasiones de impuestos que salieron a la luz el año pasado. Aún más, justamente el pasado mes de julio el gobierno tanzano fue criticado por firmar prematuramente un acuerdo minero con Barrick y venderle por demasiado poco dinero su 15 por ciento de participación en la mina de Bulyanhulu.
Bajo el barniz político, parece que Barrick va a tener que apaciguar los crecientes movimientos de descontento. Para mayor información sobre la resistencia a Barrick Gold en Nevada,EE.UU; Chile, Argentina, Tanzania, Australia y Perú, visitar el sitio web:
http://protestbarrick.net
Otra foto tomada en la marcha de agosto de 2007 contra Barrick en el Valle del Huasco. El Valle del Huasco, cuya principal actividad es la agricultura, es amenazado por el proyecto Pascua Lama de Barrick Gold. La minería de oro produce un promedio de 79 toneladas de desechos por cada onza de oro. Los desechos no solamente contienen cianuro, que es un químico tóxico usado en el proceso de exracción, sino que también contienen sulfuros y metales pesados, que contaminan el aire y el agua. Gran parte de Chile (especialmente el Norte) ya sufre los efectos de la grave contaminación causada por la minería.